La dimision de pedro sanchez

Coronavirus, fake news y el futuro de la izquierda española. UE

La manifestación del domingo, convocada por una coalición de tres partidos de derechas -el Partido Popular (PP), Ciudadanos y VOX-, cubrió de banderas españolas la Plaza de Colón de Madrid mientras los manifestantes coreaban lemas como “¡Viva España!” y “¡Viva la Policía!”.

El gobierno español estimó el número de manifestantes en 45.000, mientras que los organizadores dijeron que asistieron 200.000. Muchos portaban pancartas que decían “Stop Sánchez”, en referencia al Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que ha supervisado las conversaciones con los separatistas catalanes en los últimos meses.

Muchos españoles de derechas están alarmados por la voluntad del Partido Socialista Español (PSOE) de negociar con los partidos nacionalistas catalanes sobre la autodeterminación regional antes del juicio de alto perfil de 12 líderes catalanes acusados de rebelión, malversación y desobediencia en relación con el fallido intento de independencia de Cataluña en 2017.

El partido de centro-izquierda tiene una tenue alianza con una coalición de izquierdas encabezada por Podemos que cuenta con 67 escaños, lo que significa que el grupo necesita el apoyo de los partidos nacionalistas catalanes y vascos más pequeños.

Los manifestantes exigen “libertad” mientras se prolonga el bloqueo en España

Antes de la reunión, y en sus primeras declaraciones públicas desde el dramático abandono que supuso el intento de 17 miembros de la ejecutiva de forzar su dimisión, Sánchez dijo que abriría la carrera por el liderazgo a una votación de los miembros del partido en el país y dio a entender que dimitiría si una mayoría se pronunciaba en contra de su visión de la plataforma del partido, es decir, si estaban a favor de la abstención.  “Obviamente, no podría poner en práctica una decisión con la que no estoy de acuerdo”, dijo.

El país lleva sin un ejecutivo que funcione plenamente desde el pasado mes de diciembre, ya que los rivales no lograron acordar un gobierno tras dos elecciones en las que ninguno de los principales partidos obtuvo la mayoría absoluta.

El Partido Popular (PP), de tendencia conservadora, ganó ambas elecciones, pero sin suficientes escaños para gobernar en solitario y se vio obligado a negociar un gobierno en minoría que fue rechazado en el Parlamento a principios de este mes.

Sánchez se había opuesto firmemente a permitir que el presidente conservador Mariano Rajoy gobernara otra legislatura, señalando los repetidos escándalos de corrupción que golpean al PP y las crecientes desigualdades de riqueza provocadas por años de austeridad.

Manifestantes en Madrid piden la dimisión de su presidente del Gobierno

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este miércoles que no se van a adelantar las elecciones generales, mientras la principal fuerza de la oposición del país, el Partido Popular (PP), de centro derecha, se tambalea por una crisis interna.

Mientras tanto, el miércoles, el líder del PP, Pablo Casado, se despidió extraoficialmente de sus compañeros de partido en el Parlamento, un gesto considerado por muchos como el primer paso hacia su dimisión formal como líder del partido, que probablemente se producirá la próxima semana.

La disputa entre Casado y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP), considerada una de las estrellas emergentes del partido, se ha prolongado durante una nueva semana, a pesar de los esfuerzos por pasar la página de las luchas internas.

Las luchas internas estallaron después de que el equipo de Casado pidiera una investigación sobre las acusaciones de que el hermano de Díaz Ayuso se benefició de un contrato presuntamente corrupto de mascarillas adjudicado por su gobierno al principio de la pandemia.

El primer ministro español se ve obligado a dimitir por un escándalo de corrupción | Al Jazeera

La dimisión de Adriana Lastra ha acelerado la convocatoria del comité federal del PSOE del próximo sábado 23 de julio. El cónclave estudiará y aprobará posibles cambios en el partido tras la salida de la vicesecretaria general.

El nombramiento de un adjunto o sustituto de Lastra como vicesecretaria general del PSOE corresponde al comité federal.El máximo órgano del partido entre congresos, que deberá ratificar la decisión adoptada en esta ocasión por el líder de los socialistas, Pedro Sánchez.

Además, Sánchez podría aprovechar la ocasión para hacer más retoques en el partido, que lo está pasando mal tras los malos resultados en Andalucía y algunas peticiones de cambios internos para contrarrestar el nuevo ciclo electoral, aunque también es posible que se limiten a una remodelación de las funciones de Lastra.

Lastra anunció el lunes su dimisión como número dos del PSOE debido a “importantes cambios” en su vida personal por su embarazo lo que, según dijo, requiere “tranquilidad y relajación” y le impiden compaginarlo “con la intensidad que exige la dirección del Partido”.

Author: Gustavo Ferrer